La gran idea En 1958, Enric Bernat, fundador y presidente de S. A. Chupa Chups, creó un dulce atractivo y universal que haría felices a niños y padres. De repente, tuvo la gran idea: el mundo necesitaba un producto que 'sería como comer un caramelo con un tenedor'. Chupa Chups nació en la fábrica de Asturias, en el norte de España, con siete sabores diferentes. Se vendía a una peseta, un precio elevado en los años cincuenta, pero la intención era vender un producto con una imagen de calidad. En 1967 se inauguró una nueva fábrica en Sant Esteve Sesrovires (Barcelona). Ese mismo año, se decidió establecer la primera filial fuera de España, en Perpiñán (Francia).